viernes, 23 de julio de 2010

Supersordo, nuestro peso del pasado



Supersordo, banda conocida por los melómanos de ahora y los rockeros de los '90, es el grupo que, me atrevería a decir, más influenció la escena musical chilena. No lo digo por haber estado en alguna de sus tocatas, sino que por la experiencia que he tenido con ellos en el último tiempo. Yo la canocí por un amigo muy embalado con las bandas santiaguinas que están sonando y tocando. Me dijo que tenía que escuchar una weá que era una joya. A ver..., fue mi respuestas.

Claro que no entendí ni una weá, la encontré rara, que no sonaba muy bien. Mi amigo, quiso explicarme para que le diera otra oportunidad. Obvio, todo lo que existe de Supersordo son cintas de cassette, nada digital. Tres discos editados (el Supersórdido del '92, el Tzzzzzt del '95 y el Ruido Inmenso de Rock que es en vivo del 2000) es todo lo que hay. Nada más. A eso hay que agregarle muchos riffs, noise, gritos, letras extrañas, canciones instrumentales, experimentación, ezquizofrenia, densidad, tropel....nada muy digerible. Entonces, cómo pude llegar yo, esquinero autoinvitado, a tal conclusión. Vamos por parte.

Buscando videos de otra banda chilena, muy reconocida (Familea Miranda), vi que en YouTube salía el enlace de Supersordo. Escuché el tema "Niño Azul", el más conocido. Me encantó. Me volví loco, me puse a investigar acerca de Supersordo, lo que fueron, su historia. Siete años moviéndose en puras tocatas, nada de videos, nada de discográficas, sellos independientes. Fuera de los círculos oficiales de la música, tocaban siempre con los hiperconocidos Fiskales, donde alguna vez el víbora (guitarra en los Fiskales) dijo "lo que hace Supersordo es arte". Así se hicieron el espacio en el santiago under de la música. Mientras en Chile los oídos estaban puestos en Conce, en Santiago sonaban ellos. Dicen que su momento cúlmine fue cuando telonearon a Fugazi en marzo del '97, en el Laberinto.

Así es como Supersordo se hizo de un lugar importante en la música Rock en Chile (para mi el lugar se lo otorgo muchos años después, pero nunca es tarde para reconocer una excelente banda). Todas las bandas posteriores a esta tienen un "algo" de Supersordo". El guitarrista formó la muy prolífica Familea Miranda, de aquí también salió Yajaira, se reconoce la influencia en Innombrable y en Dizzlecciko, por sólo nombrar algunas bandas.

Desde mi experiencia, puedo decir que el sonido es fuerte, golpea duro, pero deja espacio para acariciarte. Te llama, te susurra, te habla, te grita y luego te vuelve a gritar. Sonidos muy crudos (gracias cassette), se van plasmando en letras que cuestan interpretar, pero que rascan tu cerebro para irritarlo. Eso es Supersordo, una banda que a pura tocata, con sonidos espesos, sin buscar el estrellato tiene un sitio en la historia del Rock chileno.

Para terminar, quisiera decirle al esquinero anterior que la música Rock en América Latina es gigantezca, no sólo hay que mirar hacia el Rió de la Plata, pues ahí encontraremos calados. Más aun La Renga, que a mi parecer es la inclusión del estilo de forma ortodoxa, sin hacer un aporte nuevo desde estas latitudes. Invito a todos a dedicarle un tiempo al Rock made in Chile, pues creo que se conoce poco. Siempre he tenido la impresión de que hemos mirado para otro lado, pero nunca nuestros pies.

Les dejo el link pa que puedan bajar la discografía. Es una excelente página, revísenla, porque podrán encontrar más bandas chilenas que suenan la raja.
http://www.absentamusical.com/tocadiscos/supersordo.html

Esto es tocar conchetumare!



viernes, 9 de julio de 2010

El eslabón crítico del rock latinoamericano: La Renga - Despedazado por mil partes [1996]

En alguna tertulia por allá lejos, con el amigo -el que se hace llamar capitán- caimos en el implacable cuestionamiento a la performance del rock en su versión latina, o mejor dicho, latinoamericana. La pregunta era, simplemente, si ¿era posible que el rock (con el amplio sentido y subtexto que conlleva el concepto) fuera concebido en estos lares, con la prolijidad y desenfado de las bandas anglo? Sin duda, era una pregunta que pisaba las veredas del esencialimo, la emergencia, y la espontaneidad de un género que en ese momento estabamos asumiendo como experiencia de vida. Nos retrotraimos a los clásicos, ahí donde se dispuso la piedra filosofal de las guitarras y las melenas, los excesos y la indiferencia, la contracultura y todas esas mierdas... sin llegar mucho a nada, más que a constatar que de rock sabíamos muy poco como para perseguir siquiera una respuesta.

La respuesta, sin embargo, llegó tiempo despues. No fruto del cultivo de la erudición en torno al género, sino más bien, con una vivencia que teníamos ad portas: La Renga en concierto. Sin entrar en la delirante testosterona que se libera -y en algunos casos "orgones", como bien diria el otro esquinero- en conciertos como éste, la sensación que nos dejó en aquellos tiempos fue la muestra fidedigna de que el rock, tiene en La Renga, su mejor expresión latinoamericana. Y la ecuación es simple, hijos de esta tierra dependiente, llevada adelante sobre las contradicciones inherentes de la modernidad, el rock de La Renga es puro desencajo y desequilibrio, vivencias que simplemente no calzan sobre ese deber ser de la autodeterminación y la desiderata de la libertad llevada al límite. En otras palabras, La Renga es eso, la crítica a la imposibilidad de llevar adelante la vida del modo que lo haría Jesucristo si fuera falopero.
Precisamente, en La Renga encontré en esos años la prueba manifiesta de que no podría llevar la vida por los causes que la experiencia del rock me ponía por delante, sin embargo, encontré también las mejores armas para articular esa imposibilidad, vale decir, la oportunidad manifiesta, el espacio concreto desde donde la crítica podría ser vivida como una posibilidad siempre oportunda de simplemente ir, partir, dirigirse. A pesar de las contradicciónes y de que el mundo estuviera mal hecho.

La Renga, pone de manifiesto la experiencia latinoamericana del rock desde su posibilidad más universal. La articulación de una crítica constante a los contenidos que están objetivando las experiencias más sencillas, para apelar e ir tras ellas con más vehemencia y menos pusilanimería.

Baja el disco La Renga-Despedazado por mil partes: http://www.mediafire.com/?iamwuykymai