jueves, 15 de septiembre de 2016

HOMENAJE: 30 AÑOS PATEANDO PIEDRAS…*



15.09.1986 - 15.09.2016 // #30AÑOSPATEANDOPIEDRAS

Ya son 30… y no ha pasado nada. Las industrias, las piedras, los que sobran y los ricos, -que por supuesto, lo siguen pasando tan bien. Nada ha cambiado y según parece, nada va a cambiar. El fin del mundo llegó hace rato y acá seguimos ahogados en la anémica democracia de los que no se fueron; postergados en su arribismo del poder. La violencia se comió a la escuela y nuestras ciudades más parecen un zafari comercial que el futuro proclamado en la cosa llamada Educación...

Hemos cumplido quinientos años y 30 dieciochos transformando el destino en una guerra de ausencias indolentes. Un peladero inmobiliario que se devoró la justicia popular y que ahora lo único que queda es el ajusticiamiento civil para saciar a La Gran Máquina sedienta de sangre. ¿No se suponía que juntos debíamos trabajar? ¿No se suponía que éramos hermanos? La realidad nos revienta en la cara y una vez más el Sename nos recuerda que nadie los va a echar de más.

El rojo amanecer y los sueños que recorrían los vagones de un pueblo de prisioneros, ahora se hunde en la marea de una revolución pasada a posmo. Recluida en celdas inertes que indultan su propia libertad a costa de vender una imagen de terrorismo trasnochado. Porque ahora, poco importa la transformación de la clase y el orden establecido… Hoy, es “la libertad”. Esa libertad que se paga en cuotas, que se viste en revistas, en cadenas comerciales, en las campañas ideológicas o en cualquier otra cocina donde no haya piedras que patear.

Esa libertad que bien podría derrumbar al Estado opresor o venderlo en cómodas L E T R A S, gastadas en el exilio de un sueño común que sabe añejo. Esa libertad que se metió la revolución en el bolsillo perro para irle a robar su gente, recorriendo las calles como una leprosa que pide limosna mientras le arranca el alma a su pueblo con la fantástica ilusión de una justicia civil/no-militar...  

A la luz de la Historia, #30AÑOSPATEANDOPIEDRAS parecen hoy el primer retrato de un Chile emergente, con sabor a relave, polvo, deuda y sodomía barata. Ese que nació de un aborto ilegal en clínica privada y que con los años fue arreglándose la facha facha. Vistiéndose siempre de uniforme para pasar por el mateo y relamido lamebotas del curso, pero que al final siempre  termina demostrando su angustia exigiendo ser un héroe: “el jaguar de latinoamérica”; “el que creció con igualdad”; “el del número 1 del mundo”; “el de la gordi”;  “el de los miles de millones de millones de millones de millones”; “el de los Lexus y los Mercedes”, “el de los 33 mineros”, “el que se ensucia debajo de la alfombra”, “el de la OCDE”, “el bicampeón”… el del silencio.

30 años culmple este trozo musical de la Historia popular reciente. Un fragmento de ese futuro pasado que ya exigía la independencia cultural ante la falacia de una alegría que todavía piensa llegar. Un disco visual, mucho más parecido al negativo de la foto familiar que a la “Quinta sinfonía chilensis”. Un dibujo en lápiz pasta, -al borde de la hoja del cuaderno de matemáticas-, de un país aterrorizado y oprimido que empezaba a acomodarse a los grilletes y las colleras de guzmán, chicago, la concerta, la lucía, agellini, büggi, el mamo, daniel lópez, los milicos, los luksic, los matte, los walker, los…, los… los... y las AFPs.


Ese país traicionado por la Fuerza, que perdió su libertad con un disparo en la cabeza y que hoy se la arrienda a todos los que quieren tanto, tanto, pero tanto dinero....

Atte. C.P.

*con personal dedicatoria a Los Prisioneros y J. G., Premio Nacional en vida...


Que lo disfruten: